sábado, 2 de febrero de 2008

¿Qué pensar de Dita?


Esta mujer de Rochester (Michigan USA), a la que en el colegio la conocían como Heather Renée Sweet, y que hoy se hace llamar Dita Von Teese, genera sentimientos contradictorios, incluso a mí. Confieso que mi fetichismo es bastante moderado, así que no siento una especial fijación por esa profusión de corsés, ligueros y diversas prendas de lencería fina que suele gastarse esta… cómo decirlo, ¿streeper?, ¿actriz?, ¿Pin-Up?... pero en una rápida encuesta entre mis conocidos, encontré que las opiniones estaban divididas entre la fascinación y la sospecha a timo; mi amiga Alicia, por ejemplo, le encuentra un inquietante parecido con Morticia Addams. Hay algo, no sé, algo que me atrae de ella, pero al mismo tiempo no acaba de gustarme: ¿quizá sea esa combinación entre su tórrido pasado y el presente glamuroso?

Yo, personalmente la conocí hace algunos años, fue en una película de Andrew Blake (no recuerdo el título): poco diálogo, mucho corsé, y escenas bastante más comprometidas y exigentes de las que suele hacer ahora. Luego vino su matrimonio con ese mamarracho (perdón) de Marilyn Mason y el salto al estrellato: de actriz de porno-chic y streeper a reina del neo burlesque (una Bettie Page de nuevo cuño) y musa de diseñadores. He de decir que lo mejor que ha hecho Dita en los últimos años ha sido divorciarse de Marilyn Mason (ese aire a Morticia Addams se atenuó un poco). Por cierto, aquella boda estuvo oficiada por Alejandro Jodoroswky, no quiero ni pensar de qué estaban hechos los canapés.

Leo en la red que se piensa en ella para el próximo biopic de Mata Hari, quizá sea su consagración definitiva. Hasta el momento me debato en la duda, sigo sin saber qué pensar de Dita, no me atrae demasiado toda esa sofisticación de plexiglás, como de bisutería, de la que hace gala, pero hay algo, no sé. Dita declara que antes de que el éxito llegara había hecho de todo, incluso actuar en sórdidos bares de moteros. Y yo me pregunto si no será eso, si lo que me gusta de Dita no será todo lo que no es Dita, si no me gustará en realidad Heather, esa chica de Michigan que bailaba en bares de moteros, quizá a ritmo de Susie Q.

El número de la copa de champán es el más conocido de su repertorio, puede verse en el vídeo siguiente. Advierten que es para mayores de 18 años, pero no es para tanto.




Dita Von Teese - The most amazing videos are a click away

2 comentarios:

Cowboy en paro dijo...

Creo que a mi lo que me produce un cierto repelús es precisamente que estuviera casada con el fantasmón ese, me gustaría saber como era aquella Heather, presiento que me gustaría más que Dita.

Váitovek dijo...

Me parece que voy a venir un huevo por tu blog!