domingo, 10 de febrero de 2008

Motel


El número de la puerta –único rastro que el tiempo deja en la memoria- cifra un álgebra de soledades y deseos. Vidas que discurren paralelas e incomunicables, encerrada cada una en escuetas y anodinas habitaciones, acotaciones limpias y neutras que nada dicen. Allí dentro se exprimen silencios de profundidad cósmica; pasiones que consumen cuerpos desnudos, y que apenas duran unas horas; esperas que intentan agotarse en las imágenes de un televisor mudo; enloquecidas huídas que descansan mientras el pasado persigue rastros de forma implacable… Y quizá se oiga el leve rumor de los coches pasando por la autopista, llenando ese tiempo de basura que ya nada significa. Porque ella no dice nada. Y tú tampoco. Ella mira sentada en la cama una moqueta barata que ha ahogado pasos, arruga con su mano una áspera y limpia sábana que ha envuelto momentos de deseo –el suyo, el tuyo- y que ahora aparecen inservibles, arrugados. Y tú miras, tumbado en la cama, la pared que tienes enfrente, intentando descubrir imperfecciones que no existen, respuestas que crees escondidas en una pared recién pintada. Y no las encuentras. Ella tampoco.

Ella se levanta. Coge su ropa tirada por el suelo. Sin prisas, da la vuelta a las medias que encuentra junto a la cama, dobla la ropa y la cuelga de su brazo. Y tú te dices que da igual lo que haga, que es ese tiempo de basura que siempre aparece al final. Coge su bolso. Se mente en el baño y cierra la puerta. Y tú sigues mirando a la pared.

Sale del baño ya vestida. Se arregla el pelo y se acerca a la ventana. Mira esos coches que pasan zumbando por la autopista. Consulta la hora en el pequeño reloj de muñeca que siempre lleva. Tiene prisa. El tiempo de basura ha pasado. Decidida se dirige a la puerta. Te mira, quizás sonríe. Y te dice: “adiós”; y tú contestas “adiós”. Sigues mirando a la pared recién pintada. Y piensas que te gusta ese motel.

1 comentario:

Váitovek dijo...

Tienes meme aquí, cosas del día:

http://dhavar.blogspot.com/2008/02/
meme-express-del-14-de-febrero.html